Darkman

Este clásico del cine y que cada cierto tiempo dan en el cable fue dirigido en 1990 por Sam Raimi (Spiderman) y protagonizado por el gran Liam Neeson. Darkman trata sobre el científico Peyton Westlake (Neeson), quien se mete en problemas con un grupo de mafiosos y debido a ello sufre un cruel intento de asesinato donde ellos lo golpean y hacen explotar su laboratorio. Payne vuela envuelto en llamas producto de la explosión pero logra sobrevivir, sin embargo pero su cuerpo termina con horribles quemaduras y todos lo creen muerto, incluso su novia.

Peyton es tratado en un hospital donde recibe una sobredosis de adrenalina que incrementa su fuerza pero a la vez queda algo enloquecido, luego de un momento de furia se escapa y refugia en un edificio abandonado donde crea su laboratorio en el que realiza una fórmula para crear máscaras de otras personas con apariencia 100% real, pero que luego de unos instantes se deshacen por su exposición al sol, todo ello con el propósito de vengarse de los mafiosos.

En su vendetta personal utiliza estas máscaras para insertarse en la sociedad, cazar a los sicarios y reconquistar a su novia, pero siempre lidiando con su conflicto interno de que en realidad se ha convertido en un monstruo y por ello nunca volverá a ser una persona normal y reinsertada en la sociedad, por lo que debe resignarse a aceptar su trágico destino... cuando no utiliza estas máscaras se cubre su rostro desfigurado con unas vendas y se viste con sombrero y chaqueta, convirtiéndose así en Darkman.

Tal vez no sea considerada una gran película, pero sí es muy entretenida sobre todo si les gusta el género de superhéroes, horror o ciencia ficción, todo esto mezclado con una atmósfera oscura y la música de Danny Elfman que le da una excelente ambientación. Hay una segunda y tercera parte pero sin Neeson, aunque la verdad no les he puesto mayor atención así que no me referiré a ellas.