A continuación imágenes del capítulo, nótese que el traje de Jor-El es muy parecido al que vistió Marlon Brando en la saga de Superman protagonizada por Christopher Reeve, conservando el tradicional símbolo de la S en el pecho.



La cuarta entrega de Spider-Man comenzará a filmarse en marzo del 2010 y se estrenaría el 5 de mayo del 2011.
En su cuarto disco, “No Exit”, alcanzaron la cúspide al intensificar al máximo la mezcla de estilos que lo pondrían un paso adelante en su época, haciendo un perfecto balance entre técnica, fuerza y pasión.
Producido por Max Norman, esta placa es el punto de transición entre la etapa previa de Fates Warning, caracterizada por un heavy más clásico, con toques progresivos y letras sobre fantasías épicas y mitología, y el período posterior marcado por un sello más vanguardista, innovador y de temáticas introspectivas.
No obstante, un punto en contra es la portada, carente de la calidad en ilustración que poseía el trabajo anterior, pero que refleja con sencillez el concepto que la banda plasma a través de sus temas. Sin embargo, la edición remasterizada de este año mejora bastante el arte de la carátula al hacer el paisaje más oscuro y darle mayor profundidad.
Este trabajo marcó el debut del actual vocalista de la banda, Ray Alder, quien vino a reemplazar a John Arch, pues éste se involucró en el dilema de escoger su vida personal o dedicarse completamente a Fates Warning, finalmente optó por lo primero y el resto es historia.
Si bien no tiene una calidad de producción tan buena como su antecesor, el apoteósico “Awaken The Guardian” (1986), “No Exit” puede situarse como uno de los mejores discos de metal progresivo de todos los tiempos, con mayores estructuras en composición y riffs más encaminados entre el heavy y ciertos tintes de thrash.
Con esto, “No Exit” se convierte en el disco más agresivo que Fates Warning haya lanzado hasta entonces, pero manteniendo la técnica y vanguardismo que lo ha convertido en un referente importante entre bandas como Dream Theater. De hecho, el baterista de esa agrupación, Mike Portnoy reconoce en ellos el crédito de haber sido pioneros en un género que los Theater harían más popular en los noventa, y al que muchos apuntarían como precursores.
Si bien no se trata de un disco conceptual donde una sola historia con sus respectivos protagonistas es relatada a través de cada tema, en la gran mayoría de las canciones queda plasmado en sentido metafórico el conflicto y angustia del individuo por escapar de su tortuoso mundo, que confunde con un sueño donde se siente atrapado sin salida, e impotente por no despertar.
La voz de Ray Alder impresiona en esta placa, transmitiendo intensamente las emociones expresadas en las letras, que van desde la agresividad hasta la desesperanza, logrando un excelente desempeño y perfilándose como uno de los mejores vocalistas del género.
También destacan las guitarras de Jim Mateos y Frank Aresti, quienes transitan por duetos acústicos, poderosos riffs y virtuosos y emotivos solos que los destacan como una buena dupla tras las seis cuerdas. Esto se complementa con la impecable ejecución de Joe DiBiase en el bajo, que en instantes adquiere mayor protagonismo, y la fuerza de Steve Zimmerman tras la batería.
“No Exit” abre el disco como un intro al siguiente tema, donde los tranquilos ritmos de guitarra y la voz de Alder nos invitan a este viaje hacia un mundo surrealista y sin salida. “Anarchy Divine” sigue a continuación con mayor intensidad y poder, es un golpe directo que complementa al track previo y que líricamente es cautivador, con un concepto que apela a un autoritarismo todo poderoso al estilo del Gran Hermano, con versos como “Cast your dreams, I’ll show you what to feel, Walk but keep the road I’ve paved”.
“Silent Cries” baja las revoluciones, es un tema más lento y melódico pero al mismo tiempo cautivador y potente. Destaca el dramatismo de las letras (“Questions unanswered remain, Alone they mourn a fragile mind“) y si bien no es tan técnico posee mucha intensidad.
“In a Word” comienza con cautivantes guitarras acústicas, siendo un tema más lento y tranquilo que el anterior, aunque se eleva en potencia cuando ingresan los acordes heavies y maravillosos solos como el que antecede al verso “Close your eyes, what do you see, Dreams in rhyme with reality, Or life to die in black scenery, Empty shells and what could be”.
“Shades of Heavenly Death” acelera las cosas con riffs en una senda thrash, pasando a ser uno de los temas más pesados del disco, con variados cambios donde la voz suena desgarradora y el bajo destaca por su intensidad, para luego variar a un ritmo de guitarras acústicas en plan virtuoso y teclado que enriquece su atmósfera.
Finalizamos con la épica “The Ivory Gate of Dreams”, un tema de más de 21 minutos e inspirado en la mitología griega de los Oniros, las personificaciones de los sueños, pero a la vez manteniendo la metáfora del conflicto individual entre el mundo interno y externo. Se caracteriza por una intensa y sugerente introducción acústica que sigue con pesados riffs y diversos cambios de estructura a través de las ocho composiciones que le dan forma.
Esta es una pieza apoteósica de principio a fin, con momentos de clímax y reposos, desde el inicio en “Innocence” y “Cold Daze”, donde Alder intensifica su potencial, pasando por la desgarradora fuerza de “Daylight Dreamers” hasta la desolación en “Quietus” (“Is all we do and all we dream, Doomed to drown in a hopeless stream?“) que culmina con un precioso solo de piano para dar paso a “Ivory Tower”.
A continuación siguen la serenidad de “Whispers in the Wind”, que cede lugar al apocalíptico desenlace en “Acquiescence” (“Hope leads to quiet desesperation, When reality obscures the dream, Makes the mind a grave of memories, That wander the lonely breeze“) y finalizando con hermosas guitarras acústicas en “Retrospect”. Todo lo anterior caracterizado por un ambicioso trabajo instrumental y acompañamientos de teclado que complementan una gran atmósfera.
Tal vez “No Exit” no haya recibido suficiente crédito en su momento, y seguramente Fates Warning fue opacado en términos de popularidad por bandas del estilo como Queensrÿche y Dream Theater, pero sí es un gran disco que puede ser del agrado de quienes gustan de los sonidos más agresivos del heavy metal, como de los que disfrutan con lo virtuoso y los elementos progresivos.
y su actual archi enemigo.
El actor Jackie Earle Haley, conocido por su rol de Rorscharch en la película de Watchmen, y quien hará de Freddy Krueger en el remake de Nightmare on Elm Street, podría encarnar al némesis de Hal Jordan, Sinestro, en la película de Green Lantern a estrenarse el 17 de junio de 2011, de acuerdo a lo publicado en el sitio Ain't it Cool News, quienes aseguran que el equipo de producción de la película ya habría elegido al actor para interpretar al villano.
Jackie Earle Haley también interpretará a Freddy Krueger
en el remake de Nightmare on Elm Street
Además, la misma fuente asegura que Superman haría un cameo en el filme, siguiendo la idea de las películas de Marvel que han incluído cameos de personajes como Nick Fury en Iron Man y Tony Stark en The Incredible Hulk. Lo anterior implica una estrategia por parte de Warner Brothers para utilizar al Hombre de Acero y así evitar la expiración de los derechos a favor del estudio, que si no pone en marcha algo relacionado con el personaje dejará de poseerlo en dos años tras perder el juicio interpuesto por los herederos de los creadores del kriptoniano, Jerry Siegel y Joe Shuster.
The Green Lantern, dirigido por Martin Campbell y con Ryan Reynolds en el papel protagónico, había solucionado sus problemas de encontrar la localización para comenzar a rodar la película, pues debido a los altos costos que implicaba filmarla en Australia ahora la producción se desarrollaría en México o Canadá.
Fuente: http://www.aintitcool.com/node/42742